En el escenario actual, como Movimiento por el Agua y los Territorios Zonal Centro, hacemos un llamado a la comunidad internacional a desistir de realizar la COP25 en Santiago de Chile mientras continúen los asesinatos, desapariciones y violencia por parte del Estado, pese al anuncio hecho el domingo por el Presidente Sebastián Piñera sobre el fin del Estado de Emergencia.

Llamamos a replicar la interpelación del diputado francés Alexis Corbière al ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Yves Le Drian, a no participar de la COP25 mientras los militares estén en las calles. El parlamentario además señalo que las manifestaciones responden a que «El agua fue privatizada, la salud, la educación, el sistema de pensiones, etc”.

La represión en la que ha incurrido el gobierno de Sebastián Piñera es desmedida, no existe claridad sobre las víctimas, y pese al ambiente de impunidad el Presidente hace un llamado a la normalidad. Queremos ser enfáticos en que no se pueden garantizar las condiciones para la realización de un evento de tales magnitudes mientras se estén violando los DD.HH.

Lo sucedido durante la esta última semana sigue develando el carácter genocida del Presidente Piñera y su gobierno, que es opuesto al reconocimiento que se le dio en septiembre, Global Citizen Award 2019, por su aporte “a la lucha contra el cambio climático”.

La profundización del extractivismo neoliberal, que es uno de los principales contribuyentes al cambio climático, atenta directamente contra toda forma de vida y a la fecha el gobierno ha demostrado que su verdadera lucha es por la mantención de sus privilegios al negarse a las legítimas demandas de los pueblos que habitan Chile.

El despertar político-social clama por un sistema que garantice la cobertura de los derechos sociales y la desprivatización de los bienes comunes.

¡Por la derogación del Código de Aguas y una Asamblea Constituyente!